Porque lo que no puede ser es llevar una vida estesada, venga a golpear el teclado del ordenador y sumergido en el papeleo acumulado. Porque la vida en un despacho tiene otro color, otra forma, otra postura digamos. Si los muebles hablaran, otro pajarraco nos las cantaría. Y si el pajarraco lo viera, quizás se uniría. Pues me costó convencer mucho a María para que demostrara sus habilidades invertidas. Ya tenemos una nueva p
epina! Cada pepino tiene su variante, y la de Mary es el pino-puente, como se puede apreciar en la siguiente foto. Nada fácil, si lo pudiera parecer. Pues aunque a algunos os sorprenda esta afirmación, no siempre sale bien esta acrobacia vertical, y he aqui una muestra, ante el museo de Otto Wagner en una antigua estación de metro de Karlsplatz. Y era el dia de hoy uno soleado, uno de esos pa tomarse un helado y hacer un picnic en el parque floreado.. Y que duro es ser becario, con tanto trabajo sin hacer y tanto mundo por conocer. Pronto habrá una nueva aportación, y no muy lejos de Viena. Veis la B? adeu