

Rocinante ya no es un caballo.
Pinos en
Amparo y Rosa en Campo de Criptana, en homenaje a El Quijote
Se animan y luchan contra molinos de viento con lanzas de pino. Cada quien tiene sus gigantes.
La procesionaria del pino se extiende con virulencia extrema. Empiezan con fuerza, haciendo un pino de los mas complicados de retratar, el pino doble. Congratulations también al fotógrafo, que tiene merito.
Muestra de mi última pasión. Más de uno ya me lo había dejado caer: " Tú naciste para ermitaño, como los osos", y no negare que disfruto mucho. Ahí abajo, el tiempo no existe, la mente deja arriba lo que le molesta, y solo estas tú y un aparato al que le confías la vida.
Dos pasiones unidas por el pino.
Saludos Ern